La Rioja no delimitó la superficie de bosques
17:03 | 
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En la Provincia aún no se delimitó la superficie de bosques nativos
Fecha de Publicación: 28/07/2009
Fuente: El Independiente
Provincia/Región: La Rioja
El secretario de Ambiente, Nito Brizuela, explicó que la postura de la Provincia en cuanto a los bosques nativos es de aprovechamiento en vez de conservacionista.
Lo exige la ley nacional para la protección de los bosque nativos que busca frenar el avance indiscriminado de la tala forestal. La cartera de Ambiente prevé que antes de fin de año la Provincia tenga esa norma de ordenamiento territorial. Esperan que la Nación envié los fondos para elaborar ese mapa.
La ley "Presupuestos Mínimos Ambientales para la Protección de los Bosques Nativos” –-más conocida como “Ley Bonasso” por el nombre de su impulsor, el legislador Miguel Bonasso--, cada jurisdicción debe elaborar un mapa de Ordenamiento de los Bosques Nativos. En ese mapa cada jurisdicción delimita las zonas rojas, amarillas y verdes correspondientes al grado de degradación o conservación de los bosques. La Categoría I –-Rojo son las áreas protegidas dónde no se permite desmonte, ni aprovechamiento forestal; la II – Amarillo permite aprovechamiento forestal pero no desmontes y la III – Verde permite desmonte parcial.
Ese mapa es el que justamente aún la Provincia no elaboró y el que delimita la superficie de bosques nativos que deben conservarse y los que están aptos para el aprovechamiento productivo.
El secretario de Ambiente de la Provincia, Nito Brizuela, no desestimó la importancia de realizar ese ordenamiento territorial de los bosques nativos, porque la Nación ya cuenta con un mapa realizado mediante satélite que indica que la Provincia tiene casi 705 mil hectáreas de bosques nativos.
Según ese mapa que elaboró la Nación, la Provincia tiene 8.968.000 hectáreas, de esas 704.442 son bosques nativos, de las cuales en la categoría rojo hay 105.771 mil, en amarillo 598.971 y en verde ninguna.
Ante la falta del mapa propio realizado por la Provincia no se sabe en base a qué se determinó esas más de 700 mil hectáreas de bosques nativos y si son más o menos que las indicadas por la Nación. El cuestionamiento es que desde el satélite no se puede determinar el territorio sino que la provincia debe decidirlo, señaló Brizuela.
Además en el caso de La Rioja muchas de esas hectáreas se encuentran en proceso de regularización de títulos, sin eso tampoco se puede dar aplicabilidad a la ley, precisó Brizuela.
El incumplimiento de los plazos para presentar el ordenamiento territorial de sus bosques nativos, también trae consecuencias en las provincias porque les impide autorizar desmontes y otro tipo de utilización o aprovechamiento de los bosques nativos.
Desde la Provincia se explica que aún no realizó el Ordenamiento de los Bosque Nativos por falta de recursos y espera el financiamiento por parte de la Nación.
Según el funcionario provincial se calcula que para la elaboración de ese mapa territorial se necesita entre 400 y 600 mil pesos. "Sin recursos no hay posibilidad de aplicación de la ley", dijo Brizuela y añadió que "como muchas tierras están en proceso de regularización de títulos, sin eso tampoco, se puede hacer un ordenamiento territorial aplicable".
Para la aplicación de la ley, la Provincia pide que los fondos estén contemplados en el Presupuesto nacional y sean dirigido a la conservación, restauración y aprovechamiento de los bosques nativos.
Según establece la ley de protección de bosques nativos cada jurisdicción debía realizar el Ordenamiento de los Bosques Nativos existentes en su territorio en un plazo mínimo de un año a partir de la sanción de la ley, por lo tanto debió estar listo en diciembre del 2008. La ley se sancionó con el fin de regular la expansión de la frontera agropecuaria mediante el ordenamiento territorial.
Pero en esa fecha ni siquiera había sido promulgada la reglamentación de la ley. La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, recién la promulgó el 13 de febrero del corriente año, ante el apuro por las inundaciones en la localidad salteña de Tartagal, pese a que el Poder Ejecutivo Nacional disponía de 90 días para dictar el decreto reglamentario necesario para su aplicación en todo el país.
Según Brizuela la Provincia sufre la desertificación ante la eliminación del monte que se da por la gente que tiene ganado en el campo y también por la tala. En ese caso precisó que la tala no es indiscriminada, pero sí ilegal, fundamentalmente de quebracho que se destina para leña, producción de carbón y ladrillos.
La tala se da mucho en los montes de los departamentos Capital, Rosario Vera Peñaloza, San Martín, General Ocampo, Angel Vicente Peñaloza y en el límite con Córdoba.
Cada camionada de leña cuesta alrededor de 20 mil pesos y con la nueva ley se agravaron las multas tanto para quien tala sin autorización, como para la Provincia porque la Nación monitorea vía satélite y si detecta un desmonte que la Provincia no autorizó también es multada.
La ley también establece que el Ordenamiento de los Bosques Nativos debe hacerse de acuerdo a los criterios de sustentabilidad, estableciendo las diferentes categorías de conservación.
La Provincia decidió inclinarse por políticas de aprovechamiento de los bosques nativos, en vez de la conservación. Esa fue la postura de la provincia a través del COFEMA al momento de discutir la reglamentación de la ley.
En ese contexto, Brizuela precisó que el objetivo de la ley de bosques en la Provincia es evitar la desertificación y a su vez dar un aprovechamiento a los lugares donde vive gente y evitar que se trasladen a la zona urbana.
Según el funcionario "no se puede hacer una ley eminentemente conservacionista porque aún dónde se necesita conservar los lugares vive gente que necesita el aprovechamiento de la tierra".
la Provincia puso énfasis en que la gente que vive del ganado, en especial en la zona de los llanos, pueda seguir viviendo de esa producción, precisó Brizuela.
También la ley establece que el ordenamiento de los bosques nativos debe hacerse a través de un proceso participacipativo. Brizuela señaló que si bien aún no está definido quién hará el Ordenamiento de los Bosques Nativos en La Rioja una de las alternativas sería la intervención de una empresa y no una comisión integrada por los actores sociales afectados, como suecede en otras jurisdicciones.
Brizuela dijo que se inclina por la empresa por la celeridad para hacer el trabajo. De todas maneras, precisó que recién se avanzará cuando la Nación garantice los fondos.
Otra de las discusiones en torno de la reglamentación de la ley fue que la Nación permita a las provincias tener en sus manos la aplicabilidad de la ley.
En casi todas las provincias se determinó que el área de aplicación de la ley será la Secretaría de Ambiente, en La Rioja también se decidió lo mismo a través del decreto 259 del nueve de marzo de este año. Sólo en algunas provincias la autoridad de aplicación fue la cartera de Recursos Naturales.
La ley estableció la creación de un Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos (cerca de mil millones de pesos al año) a distribuirse entre las provincias que sancionen por ley provincial el Ordenamiento Territorial de sus zonas boscosas.
Ese fondo se hizo con el objetivo de fortalecer la capacidad técnica y de control, compensar a los titulares que realicen tareas de conservación y manejo sostenible, y para fomentar las actividades productivas que los pequeños productores rurales y comunidades indígenas realizan en los bosques.
La Provincia ya presentó ante la Nación un proyecto de manejo sustentable de bosque basados en que la gente que vive asentada en el campo y tiene producción ganadera o cabritera pueda mejorar las condiciones de vida.
Para ese proyecto se pidió 1.500.000 pesos ya que a La Rioja le interesa hacer un aprovechamiento de los bosques nativos permitiendo que la gente se afinque en esos lugares.
En base a la cantidad de hectáreas de bosques nativos con que cuenta la Provincia, la Nación tiene que dar a La Rioja recursos para hacer un aprovechamiento y conservación de esas superficies.
"Ese caso --señaló el funcionario-- se da en Los Llanos y si cae en la categoría roja tendrían que irse y en ese aspecto la Provincia plantea que eso no se puede conservar porque la erosión y el viento va a ir desertificando en caso de que no se haga nada".
Fecha de Publicación: 28/07/2009
Fuente: El Independiente
Provincia/Región: La Rioja
El secretario de Ambiente, Nito Brizuela, explicó que la postura de la Provincia en cuanto a los bosques nativos es de aprovechamiento en vez de conservacionista.
Lo exige la ley nacional para la protección de los bosque nativos que busca frenar el avance indiscriminado de la tala forestal. La cartera de Ambiente prevé que antes de fin de año la Provincia tenga esa norma de ordenamiento territorial. Esperan que la Nación envié los fondos para elaborar ese mapa.
La ley "Presupuestos Mínimos Ambientales para la Protección de los Bosques Nativos” –-más conocida como “Ley Bonasso” por el nombre de su impulsor, el legislador Miguel Bonasso--, cada jurisdicción debe elaborar un mapa de Ordenamiento de los Bosques Nativos. En ese mapa cada jurisdicción delimita las zonas rojas, amarillas y verdes correspondientes al grado de degradación o conservación de los bosques. La Categoría I –-Rojo son las áreas protegidas dónde no se permite desmonte, ni aprovechamiento forestal; la II – Amarillo permite aprovechamiento forestal pero no desmontes y la III – Verde permite desmonte parcial.
Ese mapa es el que justamente aún la Provincia no elaboró y el que delimita la superficie de bosques nativos que deben conservarse y los que están aptos para el aprovechamiento productivo.
El secretario de Ambiente de la Provincia, Nito Brizuela, no desestimó la importancia de realizar ese ordenamiento territorial de los bosques nativos, porque la Nación ya cuenta con un mapa realizado mediante satélite que indica que la Provincia tiene casi 705 mil hectáreas de bosques nativos.
Según ese mapa que elaboró la Nación, la Provincia tiene 8.968.000 hectáreas, de esas 704.442 son bosques nativos, de las cuales en la categoría rojo hay 105.771 mil, en amarillo 598.971 y en verde ninguna.
Ante la falta del mapa propio realizado por la Provincia no se sabe en base a qué se determinó esas más de 700 mil hectáreas de bosques nativos y si son más o menos que las indicadas por la Nación. El cuestionamiento es que desde el satélite no se puede determinar el territorio sino que la provincia debe decidirlo, señaló Brizuela.
Además en el caso de La Rioja muchas de esas hectáreas se encuentran en proceso de regularización de títulos, sin eso tampoco se puede dar aplicabilidad a la ley, precisó Brizuela.
El incumplimiento de los plazos para presentar el ordenamiento territorial de sus bosques nativos, también trae consecuencias en las provincias porque les impide autorizar desmontes y otro tipo de utilización o aprovechamiento de los bosques nativos.
Desde la Provincia se explica que aún no realizó el Ordenamiento de los Bosque Nativos por falta de recursos y espera el financiamiento por parte de la Nación.
Según el funcionario provincial se calcula que para la elaboración de ese mapa territorial se necesita entre 400 y 600 mil pesos. "Sin recursos no hay posibilidad de aplicación de la ley", dijo Brizuela y añadió que "como muchas tierras están en proceso de regularización de títulos, sin eso tampoco, se puede hacer un ordenamiento territorial aplicable".
Para la aplicación de la ley, la Provincia pide que los fondos estén contemplados en el Presupuesto nacional y sean dirigido a la conservación, restauración y aprovechamiento de los bosques nativos.
Según establece la ley de protección de bosques nativos cada jurisdicción debía realizar el Ordenamiento de los Bosques Nativos existentes en su territorio en un plazo mínimo de un año a partir de la sanción de la ley, por lo tanto debió estar listo en diciembre del 2008. La ley se sancionó con el fin de regular la expansión de la frontera agropecuaria mediante el ordenamiento territorial.
Pero en esa fecha ni siquiera había sido promulgada la reglamentación de la ley. La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, recién la promulgó el 13 de febrero del corriente año, ante el apuro por las inundaciones en la localidad salteña de Tartagal, pese a que el Poder Ejecutivo Nacional disponía de 90 días para dictar el decreto reglamentario necesario para su aplicación en todo el país.
Según Brizuela la Provincia sufre la desertificación ante la eliminación del monte que se da por la gente que tiene ganado en el campo y también por la tala. En ese caso precisó que la tala no es indiscriminada, pero sí ilegal, fundamentalmente de quebracho que se destina para leña, producción de carbón y ladrillos.
La tala se da mucho en los montes de los departamentos Capital, Rosario Vera Peñaloza, San Martín, General Ocampo, Angel Vicente Peñaloza y en el límite con Córdoba.
Cada camionada de leña cuesta alrededor de 20 mil pesos y con la nueva ley se agravaron las multas tanto para quien tala sin autorización, como para la Provincia porque la Nación monitorea vía satélite y si detecta un desmonte que la Provincia no autorizó también es multada.
La ley también establece que el Ordenamiento de los Bosques Nativos debe hacerse de acuerdo a los criterios de sustentabilidad, estableciendo las diferentes categorías de conservación.
La Provincia decidió inclinarse por políticas de aprovechamiento de los bosques nativos, en vez de la conservación. Esa fue la postura de la provincia a través del COFEMA al momento de discutir la reglamentación de la ley.
En ese contexto, Brizuela precisó que el objetivo de la ley de bosques en la Provincia es evitar la desertificación y a su vez dar un aprovechamiento a los lugares donde vive gente y evitar que se trasladen a la zona urbana.
Según el funcionario "no se puede hacer una ley eminentemente conservacionista porque aún dónde se necesita conservar los lugares vive gente que necesita el aprovechamiento de la tierra".
la Provincia puso énfasis en que la gente que vive del ganado, en especial en la zona de los llanos, pueda seguir viviendo de esa producción, precisó Brizuela.
También la ley establece que el ordenamiento de los bosques nativos debe hacerse a través de un proceso participacipativo. Brizuela señaló que si bien aún no está definido quién hará el Ordenamiento de los Bosques Nativos en La Rioja una de las alternativas sería la intervención de una empresa y no una comisión integrada por los actores sociales afectados, como suecede en otras jurisdicciones.
Brizuela dijo que se inclina por la empresa por la celeridad para hacer el trabajo. De todas maneras, precisó que recién se avanzará cuando la Nación garantice los fondos.
Otra de las discusiones en torno de la reglamentación de la ley fue que la Nación permita a las provincias tener en sus manos la aplicabilidad de la ley.
En casi todas las provincias se determinó que el área de aplicación de la ley será la Secretaría de Ambiente, en La Rioja también se decidió lo mismo a través del decreto 259 del nueve de marzo de este año. Sólo en algunas provincias la autoridad de aplicación fue la cartera de Recursos Naturales.
La ley estableció la creación de un Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos (cerca de mil millones de pesos al año) a distribuirse entre las provincias que sancionen por ley provincial el Ordenamiento Territorial de sus zonas boscosas.
Ese fondo se hizo con el objetivo de fortalecer la capacidad técnica y de control, compensar a los titulares que realicen tareas de conservación y manejo sostenible, y para fomentar las actividades productivas que los pequeños productores rurales y comunidades indígenas realizan en los bosques.
La Provincia ya presentó ante la Nación un proyecto de manejo sustentable de bosque basados en que la gente que vive asentada en el campo y tiene producción ganadera o cabritera pueda mejorar las condiciones de vida.
Para ese proyecto se pidió 1.500.000 pesos ya que a La Rioja le interesa hacer un aprovechamiento de los bosques nativos permitiendo que la gente se afinque en esos lugares.
En base a la cantidad de hectáreas de bosques nativos con que cuenta la Provincia, la Nación tiene que dar a La Rioja recursos para hacer un aprovechamiento y conservación de esas superficies.
"Ese caso --señaló el funcionario-- se da en Los Llanos y si cae en la categoría roja tendrían que irse y en ese aspecto la Provincia plantea que eso no se puede conservar porque la erosión y el viento va a ir desertificando en caso de que no se haga nada".
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